Instagram
Facebook

Astrología

A cargo de Sandra Dreifuss

Modalidad entrevistas individuales, presenciales o a distancia, en las cuales se graba el material para que el consultante pueda re-escucharlo cuando así lo desee
Duración 60 a 75 minutos cada entrevista

La astrología es una ciencia milenaria en la que se observa la correlación energética entre cielo y tierra.
Según el postulado hermético “como es arriba es abajo", la configuración del cielo, define la configuración en la tierra

En este tipo de astrología, utilizamos el sistema solar como parámetro para definir juegos de fuerzas que se desarrollan, influyen y marcan tendencias en el hombre, inserto en un planeta de este mismo sistema. Como ejemplo más cercano podemos ver que la Luna determina, por sus movimientos y su energía, las mareas y los ciclos menstruales femeninos entre otras cuestiones. Esto nos muestra que somos receptivos a la energía que emite este satélite de la Tierra, siendo también receptivos de otras energías no tan cercanas, mostrándonos la interconexión entre “lo de arriba y lo de abajo".

La astrología se ha utilizado desde tiempos inmemoriales como modo de predecir fenómenos cíclicos, meteorológicos, colectivos e individuales. La astrología estudia las diferentes energías que posee cada planeta, teñido por las cualidades de cada signo en las áreas de experiencia que se desarrollan las mismas, es decir las casas.

Abordaje: Carta Natal

El elemento básico que se utiliza para ello es la carta o mapa natal de un evento, de una persona, de una situación, etc.. Se utiliza la fecha de nacimiento o inicio del evento ya que la carta es como una semilla, que contiene toda la energía en potencia que luego a lo largo de la vida, la persona irá desplegando de acuerdo a sus circunstancias y libre albedrío. La carta se levanta utilizando las coordenadas de latitud, longitud más el tiempo ( momento en el que sucedió el evento) para lograr así armar el dibujo o mandala de la misma.

En ese momento único, los planetas formaban diversos ángulos entre sí, se relacionaban de un modo especial, ya que estaban ubicados de una manera en particular. Esto nos permite observar que la energía que representa cada planeta está en una relación determinada con las demás energías de la carta.
Luego esto se interpreta simbólicamente, puesto que cada planeta, signo y casa muestran cualidades energéticas arquetípicas diferentes. Relacionando el planeta, la casa (sector de la carta en la que se encuentra), signo en el que está (sector del cielo en el que está en ese momento) y los aspectos (relaciones entre los planetas) y sabiendo leer adecuadamente toda esta información, podemos llegar a comprender esa estructura energética.

En realidad podemos decir que la carta es un código energético, que se puede comparar con el código genético. ¿Que implica esto?
Que tenemos ciertas energías que nos están más facilitadas que otras, algunas se pueden expresar con fluidez y otras precisan más esfuerzo y trabajo para poder manifestarse, algunas son más afines a nuestra identidad conciente o solar y otras son más lejanas o antagonizan con ella.

Esta correlación de fuerzas moldea aspectos de la personalidad que pueden aparecer tanto a la luz, como quedar en la sombra, de acuerdo a la educación que recibimos, el entorno en el que nacemos y lo que traemos de otras vidas anteriores. Entonces una persona con la misma carta natal que otra, no tiene necesariamente que ser un calco de la primera, por sus circunstancias y porque puede asumir concientemente algunas energías y dejar otras como sombra o inconciente, mientras que la segunda hace una “elección" diferente.

Lo que no asumimos como propio, nos viene de afuera como destino. El destino es lo que no conocemos de nosotros mismos.
Desde esta mirada astrológica, el destino nos trae lo que tenemos que conocer de nuestro mandala energético.
Si estuviéramos centrados en el centro del mandala, seríamos capaces de verlo todo y comprender desde un lugar más sabio lo que nos sucede. Como generalmente esto no es así, nos paramos en el borde del mandala y solo vemos una pequeña parte y por ello nos sorprende la vida con los sucesos que nos tocan vivir.

No se trata de controlar la energía de nuestra carta, sino aprender a integrar los distintos elementos permitiendo que fluyan de un modo natural. Cuando no jugamos una energía concientemente generalmente la “proyectamos" en quienes están cerca nuestro y por ello, algunas relaciones “nos torturan" porque nos muestran la energía que rechazamos.

Nuestro libre albedrío sigue intacto ya que cada paso que damos implica una elección al desplegar nuestro mandala energético, por eso lo que hacemos con nuestra energía es responsabilidad nuestra.

Astrología y Psicología

La óptica de este tipo de astrología, es una conjunción entre astrología y psicología.
Los planetas son también funciones psíquicas que operan (de acuerdo a la carta o mandala de cada uno) de formas particulares. Se pueden observar, a partir de la carta natal, ciclos y procesos (de donde venimos y hacia que energía vamos), pero no hacemos predicciones deterministas ya que como mencionamos anteriormente, las elecciones son las nuestras de cada día y al predecir fijamos la mente en una situación particular, que no va a ocurrir nunca de la manera que imaginamos, ya que la energía es mucho más creativa que nuestra limitada imaginación.

Cada energía se puede expresar en niveles diferentes de conciencia, por eso un maestro espiritual y una persona común pueden tener cartas similares, pero cada uno plasmará esa energía en octavas diferentes.

Revolución Solar, Tránsitos y Sinastría

Además de la carta natal, cada año tenemos una lección especial de una determinada energía, es un mapa de ese año específico y se llama Revolución Solar, que junto con los tránsitos (el movimiento de los planetas sobre nuestra carta) nos marcan los momentos particulares que estamos viviendo y los aprendizajes a realizar en ese año.

También se pueden hacer revisiones de la carta a la luz de algún episodio puntual: muerte, matrimonio, compra de vivienda, nacimientos, etc.…, para comprender patrones de repetición inconscientes que funcionan en nuestra vida y se repiten hasta que logramos integrarlos a nuestra comprensión conciente.

Por último se pueden comparar dos cartas natales, realizando una sinastría, para ver el vínculo que se despliega entre dos personas, observando lo que fluye y lo que se tensa entre las mismas.